Durante una entrevista que me hicieron para un libro sobre Agile Caoches Internos, me pidieron que describiera en 150 palabras cómo inicié mi camino en esta profesión. Esto fue todo un reto para mí, ya que me han dicho que tiendo a entrar en más detalles de la cuenta cuando cuento una historia. Algo en lo que he estado trabajando por mejorar.
Por lo tanto, me pareció una buena oportunidad para dar inicio a este blog, el cual es un proyecto que he querido iniciar desde hace tiempo. Lo que me a atrasado ha sido que se lo delegué, casi en su totalidad, a mi saboteador interno y ha cumplido su rol a la perfección.
El camino que me ha llevado al constante aprendizaje que implica el Agile Coaching, nace de los eventos que me iniciaron en la ruta de la Agilidad..
150 palabras? Ni cerca…
Mientras trabajaba para una empresa de alrededor de 150 personas, el CEO de la empresa trajo la idea de empezar con la implementación de Scrum en todos los equipos. Recuerdo claramente que nos puso un video de unos 7 minutos que resumía el marco de trabajo, él tomó el rol de Scrum Master para todos los equipos y dio el banderazo de salida…Scrum Away!!
Al poco tiempo cayó en razón de que él no era la persona más indicada para ser Scrum Master y abrió la posibilidad para que alguien, dentro de la empresa, tomara el rol. Yo había venido creciendo en la empresa y era alguien a quien buscaban con regularidad cuando había que resolver un problema, lo que era un gran motivador para mi.
Sin embargo, mi día a día me había venido alejando de apoyar a los otros equipos y mi nivel de satisfacción con las tareas que tenía no era el mejor. Esto fue hábilmente señalado por mi supervisora, a quien siempre le voy a agradecer por sembrar esa duda en mi cabeza.
Por lo tanto, apenas oí el anuncio del CEO, hice lo que corresponde. Busqué “Scum Master” en Google y acto seguido me propuse como voluntario para el nuevo rol. Al Jefe, le pareció una buena idea y me dio la oportunidad de prepararme para tomar el rol.
De Scrum Master hacia Agile Coach
Conforme fue evolucionando mi rol, nos fuimos dando cuenta de que una sola persona no puede ser el único Scrum Master de unos 10 equipos que teníamos en ese momento, con actividad desde Desarrollo de Software hasta Diseño Gráfico.
Eventualmente, logramos tener un Scrum Master en cada equipo lo que me llevó a trabajar con varios equipos, al mismo tiempo, en su implementación Ágil. Fue entonces cuando me di cuenta de que necesitaba adquirir otras herramientas y habilidades para poder dar el apoyo que requería la empresa.
Al mismo tiempo que trataba de descifrar el camino que debía de tomar, se me presentó la oportunidad de trabajar como voluntario con el Scrum Alliance en el Coaching Advisory Team. Esto me ayudó a conocer otros coaches profesionales y agilistas, lo que me presentó un panorama mucho más amplio de posibilidades que se fueron convirtiendo en mi camino para ir creciendo como Agile Coach.
Lo que más aprecio en toda esta aventura es todas esas personas alrededor del mundo que me han acompañado de alguna forma y de quienes he aprendido una cantidad increíble. Con ellos comparto objetivos en común como crear una comunidad latinoamericana de Agile Coaching. Otros me han invitado a compartir mis experiencias en sus eventos, o me han retado a ser más osado y confiar en mis habilidades.
Claramente, no iba a lograrlo en 150 palabras, pero por aquí va la historia. En las próximas entradas voy a compartir las experiencias he conseguido en este camino, espero que pueda aportar algo de valor a otras personas y sobre todo iniciar una conversación que nos ayude a crecer juntos.
Nos vemos…